Últimamente se me han pasado por la cabeza muchas cosas que detestar. No sé si es que ando en un círculo de negatividad, lo cierto es que no me siento deprimida, sino que más bien puedo decir que a través de la negación se afirma uno a sí mismo, y afirma cosas también. Y me di cuenta de que hay algo que detesto y que en una persona tan irreverente como yo es raro detestar, y es precisamente la arrogancia y la irreverencia que muchos tienen frente a la complejidad.
La "realidad" es compleja, y es esto lo que la hace fascinante, y a la vez, inaprehensible y, por lo tanto, incomprensible del todo ¿Es esto tan difícil de aceptar?
Cualquier intento que haga el hombre por explicar cualquier cosa es una simplificación, es siempre insuficiente. Así es. Cualquier discurso, sea del tipo que sea, es un intento desesperado de nuestras mentes por simplificar algo inaprehensible que siempre está ahí, dentro, fuera, alrededor, que es demasiado complejo para nuestra comprensión tan primitiva. La ciencia, el arte, la mismísima palabra, son simplificaciones de diferentes aspectos de esa complejidad, y es que quizás en ella, esos "aspectos" ni siquiera existen como tales. Hasta este escrito es una simplificación. Es más, creo que simplificar es nuestro mejor talento.
Entonces, cómo es que alguna gente, y no precisamente de la más experta, puede creer que es capaz de comprender e incluso predecir cosas tan complejas como un individuo, una economía, una partícula, yo que sé. Admiro todos los esfuerzos que se hagan por conocer, por indagar, por cada vez simplificar un poco menos lo simplificado. Pero, por favor, más respeto por el caos, la complejidad y el devenir, sólo así seréis capaces de comprender un poco más.
Texto escrito originalmente el 08/05/2010
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Debemos tener sed de conocer las cosas... Mi reflexión
ResponderEliminarGracias por el comentario Luis. A mi parecer la clave está en no confundir "complejidad" con "complicación". Complejidad es cuando alrededor de un hecho hay demasiadas variables a tener en cuenta. Complicación es cuando rebuscas los argumentos y das mil vueltas alrededor de algo que no lo necesita. Saludos.
ResponderEliminar"DIOS", el mejor ejemplo de simplificación de la mente humana.
ResponderEliminarA preguntas tan complejas como ¿quienes somos? o ¿porque existimos? le damos una respuesta muy sencilla:
Bueno, hubo una vez un señor igual al hombre que creó la tierra en 7 días y luego creó al hombre a su imagen y semejanza y luego de una de sus costillas creó a la mujer. Luego vino una serpiente que los tentó y los hizo caer en el pecado y por eso dios los castigó con una vida dura y difícil en nuestro mundo, pero no te preocupes solo tienes que ser bueno y cuando te mueras irás al paraíso en donde reina la paz y el amor.
- ¿Pero como puede ser posible todo esto???
- Shhhh no pienses!! solo tienes que "tener fe".
- Pero.. y el big bang??
- Cállate!! o irás al infierno!!!
Así opera la religión, alimentándose del miedo, la paranoia y la ignorancia de la gente, sobre todo la religión islámica, que es una de las que mas rápido crece en el mundo lamentablemente.
Por eso Marx decía que la religión es el opio de los pueblos. Lo irónico es que el comunismo también terminó siendo el opio de los pobres.. jeje
Saludos, Eduardo.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo en que la idea de "Dios" es una de las más grandes simplificaciones humanas, sobre todo en las grandes religiones monoteístas, que plantean que una sola fuerza mueve a su voluntad y da sentido al universo, es "él" o la "ausencia de él", a mi parecer, una cosmogonía demasiado pobre.
Ahora, si vamos a meternos en problemas de cómo operan las religiones como instituciones, tendríamos que hablar ya de relaciones de poder (mismo caso que las doctrinas políticas) y allí hay mucha tela que cortar. Estoy de acuerdo con lo que planteas en este sentido y sólo agregaré que espero en alguna oportunidad publicar alguna opinión mejor elaborada sobre ello =)
Gracias por tu buen comentario.